En una alarmante situación en la Antártida, las colonias de pingüinos emperador están perdiendo la totalidad de sus polluelos debido a la carencia de hielo, un fenómeno atribuido al cambio climático. Un reciente estudio publicado en la revista Nature reveló que en la temporada reproductiva de 2022, cuatro colonias de estos emblemáticos pingüinos no lograron que sus polluelos sobrevivieran.
Liderados por Peter Fretwell, investigadores monitorearon estas colonias a través de imágenes satelitales en el mar de Bellingshausen. Descubrieron que la falta de hielo marino dejó a las crías vulnerables, ya que el hielo es fundamental para su supervivencia durante el período de emplumamiento. Sin este elemento crucial, las crías quedan desprotegidas y tienen pocas posibilidades de sobrevivir.
Los pingüinos emperador regresan cada año a los mismos lugares para reproducirse, colocando un solo huevo por pareja. En temporadas anteriores, la falta de hielo podía solucionarse moviéndose a áreas cercanas más adecuadas. Sin embargo, en esta última temporada, no había suficiente hielo en ninguna zona circundante, lo que resultó en una emergencia devastadora.
El estudio advierte que si las tasas actuales de calentamiento persisten, más del 90% de las colonias emperador podrían estar casi extintas para finales de este siglo. Esto representa un impacto directo del cambio climático en una de las especies más icónicas de la Antártida.
Los pingüinos emperador dependen del hielo marino tanto para reproducirse como para alimentarse. Utilizan el hielo como hábitat de caza de peces y otras especies marinas a través de las grietas en el agua congelada. Aunque no han sido amenazados por la caza masiva u otras actividades humanas, el cambio climático y la reducción del hielo marino se perfilan como su mayor amenaza de supervivencia.